Borrar
Imagen de San Juan de Gaztelugatxe.
«Juego de Tronos vino a Euskadi por la imagen de San Juan de Gaztelugatxe»

«Juego de Tronos vino a Euskadi por la imagen de San Juan de Gaztelugatxe»

La directora artística de la serie, Christina Moore, ofrece una conferencia en la UPV para explicar cómo se construyen los escenarios de 'Juego de Tronos' y desvela por qué que la costa vizcaína fascinó a los localizadores de la cadena HBO

óscar b. de otálora

Jueves, 16 de marzo 2017, 18:58

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

«Esta es la imagen que nos hizo venir a Euskadi». La frase la ha prounciado esta mañana Christina Moore, supervisora de arte de 'Juego de Tronos', al tiempo que señalaba una fotografía de la sinuosa escalera que conduce a la ermita de San Juan de Gaztelugatxe. La artista no ha dicho nada más. Simplemente ha dejado que la imagen del mar golpeando las rocas y el camino que atraviesa el agua como una serpiente de piedra hablen por sí mismos y conecten con el universo medieval de la saga de la HBO. Todo el mundo lo ha comprendido.

Christina Moore es la responsable de las banderas que se ven en las almenas de los Siete Reinos, las sillas en las que se sienta Tyrion Lannister, las calles por las que huye Arya Stark... Gran parte de las imágenes ya míticas de la ficción de la cadena HBO han surgido de su imaginación. Esta mañana ha ofrecido una conferencia en el abarrotado paraninfo de la Facultad de Ciencia y Tecnología de la UPV para explicar cómo el equipo de la serie es capaz de convertir un hotel abandonado en una sala de torneos. Moore ha desvelado muchos de los secretos de su trabajo pero ha guardado un silencio sepulcral sobre la séptima temporada y sobre qué sucederá en el rodaje que tuvo como escenario San Juan de Gaztelugatxe. «En la HBO nos obligan a firmar un pacto de sangre para no revelar ni un solo dato de la trama. Si dijese algo me cortarían el cuello», explicó.

Moore -licenciada en Arquitectura y en Bellas Artes y ganadora en 2008 de un Emmy por la dirección artística de la serie 'John Adams'- se había comprometido con la UPV a ofrecer una conferencia mientras estuvo en el rodaje vasco de la serie. En su momento no tuvo tiempo para acudir a la facultad pero hoy ha cumplido su promesa. La directora, según ha explicado, vive bajo la tensión de coordinar la puesta en escena de cinco equipos de rodaje que graban en otros tantos sitios distintos a la vez. Y mientras pone orden en ese caos, visita museos para inspirarse o busca detalles en la artesanía local de cada país en el que se rueda la saga para incorporarlos a los escenarios. Y siempre rodeada de artistas, carpinteros, pintores o escultores que le ayudan a convertir el lugar más insólito en escenario de los sangrientos dramas de 'Juego de Tronos'. Estos han sido algunos de sus retos.

El combate de La Montaña

Una de las escenas ya canónicas de 'Juego de Tronos' es el enfrentamiento entre La Montaña, el asesino gigante de los Lannister, y el príncipe Oberyn Martell. En la serie, los espectadores vieron una pelea en una explanada de torneos de Desembarco del Rey, en la que cientos de ciudadanos asisten aterrados a la inminente muerte de uno de los protagonistas. «En la realidad, se trataba de un hotel abandonado en Dubrovnik. Había sido bombardeado durante la guerra y estaba lleno de graffitis. Como en la costa croata hay pocos sitios planos lo utilizaba un equipo de fútbol», recuerda Christina Moore. «Tuvimos que cambiarlo por completo. Utilizamos el yeso para cubrir las paredes del hotel y lo pintamos todo de nuevo. Los televidentes pueden ver que hay muchos árboles en el fondo. Se trata de una técnica para reducir el escenario y centrar más las imágenes», explica Moore. «Uno de nuestros desafíos fue quitar el escudo croata que está situado en el centro de ese patio y sustituirlo por un mosaico con el escudo de los Lannister. Hicimos un gran trabajo pero el día antes del rodaje nos cayó una tormenta y se llenó de barro. Quizá fue bueno, porque se consiguió un aspecto más antiguo. Estoy muy orgullosa de ese mosaico, el problema es que solo se ve bien cuando la cabeza del príncipe es aplastada contra el suelo. Y creo que en ese momento los espectadores no se fijan en el mosaico», ironiza Moore.

Los gladiadores en la plaza de toros de Osuna

«Normalmente no acudo a los rodajes porque no tengo tiempo, pero sí que pude estar en la plaza de toros de Osuna (Sevilla), donde se produce una de las escenas más épicas de 'Juego de Tronos'. Recuerdo el calor y que 19 personas sufrieron quemaduras por los lanzallamas», recuerda Moore. Este coso taurino fue uno de los elementos claves en la quinta temporada, en la que Daenerys, tras una rebelión en un circo de gladiadores -en ese se convirtió la plaza- es rescatada por su dragón. El aliento de fuego de la bestia -que en Osuna se veía como gruas a las que habían conectado lanzallamas pero en la serie fue sustituido por imágenes animadas- fue uno de los riesgos. «Lo habíamos preparado todo muy bien pero no tuvimos suerte. Había una pared verde gigante que íbamos a emplear para la animación digital, pero el viento se la llevó un día antes y no pudimos usarla», rememora.

Su mejor recuerdo de Osuna son los extras. «En el resto de Europa se nota mucho que lo hacen por el dinero, pero en España son seguidores de la serie que vienen con entusiasmo. Aquel día tuvimos que utilizar 600 extras, que estuvieron cantando y con un humor excelente pese a que hacía un sol abrasador», agrega Moore. En la plaza de toros se rodó el gran movimiento de masas, pero el vuelo del dragón y los primeros planos de los actores se grabaron en los estudios de la HBO en Belfast, cuartel general de la saga.

Piedras de goma en las calles de Girona

Convertir Girona en el puerto de Braavos fue todo un reto para Christina Moore. «Tuvimos que eliminar todo lo moderno de sus calles y, cuando grabamos en la catedral, camuflar cualquier símbolo religioso, porque en Braavos no hay religión», comenta. En la sexta temporada, las calles de Girona fueron el escenario de unas de las persecuciones más tremendas de toda la saga. En ella, una asesina de los hombres sin rostro persigue a Arya Stark para acabar con su vida. «Tuvimos que cubrir todo el empedrado de la calle con piedras de goma para que los extras no se dañasen en las caídas. Todas las alfombras que se ven son también especiales para que nadie resultase dañado en una caída». Desde un punto de visto artístico, la directora explica que una de las claves son «las redes de pescadores y la mugre». «Eso nos ayuda a dar el aspecto que tendría un puerto pesquero de 'Juego de Tronos'». El anticlímax de su recuerdo es que tuvieron que rodar en una calle que finalizaba en un conocido restaurante. Mientras Arya Stark se jugaba la vida en las calles de goma, «cientos de turistas nos sacaban fotos con el móvil».

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios